presenta
LA FURIA DEL VOLCAN
Protagonizada por Marina Munilla y
Dirigida por Gerardo Grillea
Temporada 2017
Reestreno: sábado 6 de mayo a las 20 hs
Funciones: sábados a las 20 hs.
Teatro No Avestruz.
Dirección: Humboldt 1857. Palermo
Reservas al: 4777 6956 – reservas@noavestruz.com.ar
Reservas y compra online: http://ift.tt/1CBmfxe
Localidades: $190 General y $160 est. y jub
Facebook: http://ift.tt/2c7Pu8H
Twitter:@furiadelvolcan
¿Llevo mucho tiempo el armado de la obra?
Fueron dos años intensos de investigación, de búsqueda de información en libros, material fílmico, periodístico, entre otros. Creemos que el momento mas complejo fue cuando tuvimos que decidir qué contar, ya que toda su vida es realmente una fuente inagotable.
Luego vinieron los casting, en varias etapas. Vimos decenas de actores talentosos con ganas de participar de una obra que sabíamos iba a tener repercusión, y ellos también. Es algo que se huele en el aire, que se intuye. Y los artistas tenemos ese sexto sentido. Después vinieron las buenas noticias: el Fondo Nacional de las Artes nos brinda su apoyo y apuesta a nuestro proyecto, así como también Proteatro y la Embajada de Suecia. En ese momento nos dimos cuenta que nuestro sueño se iba materializando y tomando forma. Tuvimos casi un año intenso de ensayos, en donde la sinergia con los actores, el director y el texto iba creando una especie de maquinaria inmensa que crecía ante nuestros ojos: la obra iba cobrando vida propia, casi mas allá de nosotros mismos.
¿Qué cosa o que sensación has sentido cuando termino el ensayo general o primera función?
Lo que mas nos impactó es el estado del público cuando finaliza la obra cada noche. Emociones a flor de piel, lágrimas que caen entre frases como "ella hizo bien" ó "pobre la hija no tenía la culpa que mala mina". El público toma partido desde distintas posturas, llora y ríe a la vez por momentos. Nosotros planteamos un viaje a otro tiempo, a la vida de una mujer que destrozó todo sin darse cuenta, y que lo hizo de manera decidida y sin medir las consecuencias. Pero fue por su sueño y no se arrepiente. La identificación desde la negación o la aceptación con la vida Ingrid es innegable. La gente toma partido necesariamente.
¿Cuál fue el mayor desafío, al momento de empezar a armar el personaje?
Claramente, el hecho de tener que interpretar a una persona real, y en este caso tan emblemática como lo fue Ingrid Bergman, ya hace que de algún modo haya una carga fuerte en la construcción del personaje. Lo primero que tuve que hacer es pedirle permiso, ya que la evocación que hago de ella cada noche lo amerita. En segunda instancia, el respeto con el que lo hago, y una sensación de venir a saldar un pendiente que ella dejó, o a decir algo que no pudo en vida. Decidí no volver a ver sus películas para no crearla de afuera hacia adentro. Sino que me interesó entender a esa mujer que vivió un infierno cuando decidió cambiar el rumbo de su vida, cuando quiso salirse de la caja de cristal en la que la habían metido. Los comentarios del público me emocionan realmente, cuando me dicen cosas como "vos sos Ingrid" ó "en un momento sentíamos que ella estaba allí". Nunca voy a olvidar este personaje, de hecho estoy segura de ello. Todo lo transito realmente. Si fuma, fumo. Si tomaba, tomo. Sólo hay verdad en el escenario. No me permitiría a mi misma hacerlo de otra forma.
Me imagino que después de estos años arriba de un escenario debe haber un tipo de obras teatrales que te gustan más que otras… ¿Cuáles son tus preferidas para actuar y cuales para ver?
Para actuar ya casi no acepto propuestas externas a lo que es nuestra Compañía. Tiene que ser un proyecto que me atraiga realmente, y un personaje que tenga algo importante que decir, y una contradicción interna. Durante el 2016 me ofrecieron varios proyectos, algunos de ellos comerciales, pero no me atrapaban. Obviamente aparece cierto remordimiento de conciencia cuando veo los subtes empapelados y con carteles virtuales con la imagen de una actriz personificando un papel que me habían ofrecido, pero no me arrepiento. No es una pose. Me sucede lo mismo con las publicidades. Realmente no quiero que mi cara se asocie a un detergente ultra líquido o a un Banco que quiere posicionarse. Si bien es una entrada importante la publicidad, también el actor debe cuidar su imagen. Lo mismo me sucede con las participaciones en televisión. Si no me suma a mi carrera no lo hago. Es decir, tiene que implicarme un desafío en lo actoral. Necesito conectar con lo que hago, y la verdad no me sucede seguido. Para mi el texto es fundamental. En Ingrid se trabajó muchísimo y por eso es muy valorado. Por momentos parece un clásico y tiene cierto vuelo poético. Además, es una obra que se entiende, de principio a fin. Y no hablamos de las miserias familiares en el sentido que ya a mi parecer sufrió un desgaste inminente: el de la familia disfuncional. Creo que debemos apuntar a crear nuevas formas de ver, a entender que las personas que van a ver el teatro quieren olvidarse de lo miserables que son algunos de sus familares, o de los conflictos de la clase media baja. Creo que tenemos que volar un poco mas alto. Y creo que debemos hacer obras que se entiendan. Los estudiantes de Dirección, o de Actuación, estamos acostumbrados a probar cosas extrañas, a forzar los límites. Eso está buenísimo para las clases, pero el público es otra cosa. No quiero hacer teatro solo para mis compañeros de teatro. Quiero hacer teatro para la gente común. Y eso es La Furia del Volcán. Y por eso emociona.